Buenas prácticas para la autonomía de personas con discapacidad

La Comisión Europea lanza esta convocatoria en el marco de Horizonte Europa con el fin de identificar, analizar y promover buenas prácticas que fortalezcan la autonomía y la independencia de personas con discapacidad (física, mental, intelectual o sensorial). La propuesta responde al marco de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, fomentando el derecho a decidir por sí mismas y a una vida independiente e inclusiva. Las iniciativas seleccionadas deberán contribuir a desarrollar conocimientos e intervenciones centradas en la persona, accesibles, sostenibles y adaptadas a los diversos contextos comunitarios, con énfasis en la accesibilidad, la inclusión social y la equidad.

Temáticas y criterios de elegibilidad:
Las propuestas pueden enfocarse en una discapacidad específica o abordar múltiples tipos, y deben considerar el papel de las familias como actores clave en la inclusión. Se espera que los proyectos exploren prácticas en ámbitos como vivienda, educación inclusiva, empleo, tecnologías asistivas, acceso a servicios comunitarios, formación continua y bienestar emocional. Pueden participar entidades legales establecidas en Estados Miembros de la UE, países asociados a Horizonte Europa y ciertos territorios de ultramar. No hay restricciones geográficas para la postulación, pero los requisitos de financiamiento pueden variar según el tipo de entidad (públicas, privadas o internacionales). Las acciones elegibles incluyen investigación e innovación (RIA), innovación (IA), apoyo y coordinación (CSA) y cofinanciamiento de programas (CoFund).

Tips:
Para aumentar las posibilidades de éxito, se recomienda construir consorcios con diversidad institucional (ONG, entidades públicas, universidades, sociedad civil) y experiencia en inclusión y discapacidad. Es clave demostrar un enfoque centrado en la persona, con evidencia del impacto en la vida cotidiana, autoestima y derechos humanos de las personas con discapacidad. Incorporar tecnologías accesibles y metodologías participativas fortalecerá la propuesta. También es relevante mapear políticas y prácticas existentes a nivel local y regional, y proponer soluciones escalables y adaptables. Incluir acciones que favorezcan el diálogo entre servicios (educación, empleo, salud, transporte) y actores (familia, Estado, comunidad) será valorado positivamente.